Conflicto postelectoral, guerra en los medios y en los tribunales
Aunque a los medios de comunicación el Partido Acción nacional les insiste en que le proceso electoral del domingo dos de julio fue "limpio, transparente, sin irregularidades", ante los tribunales electorales ha solicitado la anulación de votos en casillas de Tabasco, Distrito Federal, estado de México, Veracruz, Oaxaca y Guerrero, entidades donde Andrés Manuel López Obrador obtuvo su votación más alta. En otras palabras,
tampoco están tan convencidos del conteo de los votos.
En tanto, López Obrador señala que se hizo "
un fraude a la antigüita" y presenta
mas pruebas de las irregularidades que se presentaron durante la jornada electoral.
Al que no le gustó la presentación de los videos con un presunto embarazo de urnas fue al IFE, que
refutó dichas grabaciones;
no hubo tal relleno de la urna electoral dice el cuestionado árbitro de la contienda.
Ayer también se descubrió que
funcionarios del IFE regresaron a algunos distritos electorales para abrir los paquetes, sin la presencia de los representantes de los partidos políticos, lo que sorprendió a los mismos funcionarios del IFE y alertó a la Coalición por el Bien de Todos.
En España y Estados Unidos hubo rectificaciones por los apresuramientos para felicitar a Felipe Calderón, como ganador. En
la Casa Blanca dijo que revisará la percepción que tuvo en ese momento. Al PAN
esas rectificaciones no le gustaron para nada y se irritó. Tampoco debió gustarle
la exigencia del Financial Times que se sumó a las voces que piden un recuento de los votos. Coro al que se adhirió el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente, quien pidió
disipar las dudas sobre el proceso electoral.
El que también anda muy enchilado es el presidente Vicente Fox y apenas levantó la veda de las declaraciones aludió a los
renegados del proceso electoral, como si le hiciera falta más leña al fuego.
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